El Consejo Económico y Social (CES) hizo entrega este martes al presidente Luis Abinader del informe final del diálogo sobre la crisis haitiana y sus repercusiones para la República Dominicana. El documento, resultado de seis mesas temáticas, contó con la participación de sectores sociales, empresariales, laborales, representantes de la sociedad civil y expresidentes del país. La entrega se realizó en un acto en el Palacio Nacional y estuvo encabezada por Rafael Toribio, presidente del CES.

Toribio explicó que el informe resume los principales hallazgos y recomendaciones alcanzadas durante el proceso de diálogo, incluyendo 26 líneas de acción y 151 propuestas concretas. Estas abarcan áreas estratégicas como migración, comercio bilateral, comunidades fronterizas, seguridad, relaciones internacionales y asuntos laborales, en un marco de pluralidad y democracia.

El CES indicó que el informe se entregó tanto en formato físico como digital, con el objetivo de facilitar su difusión y consulta entre los distintos sectores involucrados en la implementación de las recomendaciones. Además, se subrayó la importancia de dar seguimiento a las propuestas para mitigar los efectos de la crisis haitiana en territorio dominicano.

Como parte del proceso de socialización, el CES anunció que el informe también será entregado a los expresidentes Danilo Medina, Hipólito Mejía y Leonel Fernández en reuniones previstas para los próximos días. Esto busca garantizar que las recomendaciones sean consideradas por los actores políticos y sociales de distintas corrientes.

El presidente Abinader recibió el documento agradeciendo el esfuerzo de todos los sectores participantes y resaltando la relevancia de contar con un diagnóstico integral que permita abordar la crisis haitiana desde un enfoque coordinado y efectivo. El mandatario enfatizó la necesidad de políticas claras que protejan a las comunidades fronterizas y fortalezcan la cooperación bilateral con Haití.

El informe final del CES marca un paso importante en la estrategia dominicana para enfrentar los desafíos derivados de la situación en Haití, buscando generar soluciones sostenibles que integren a todos los actores relevantes y promuevan la estabilidad, la seguridad y el desarrollo en la región fronteriza.