Daurin José Trinidad Infante, acusado de la desaparición y muerte de la niña Carla Massiel Cabrera, declaró este lunes que su caso está siendo manipulado para ocultar a los autores intelectuales y materiales del crimen. Según sus declaraciones, él entregó a la menor a Liliana Santana, hija del doctor Hipólito Santana, propietario de los Centros Médicos Integral.
Trinidad Infante aseguró que recibió inicialmente un pago de 100,000 pesos para trasladar a la niña con el pretexto de realizarle una supuesta prueba de ADN. Posteriormente, dijo que le fueron entregados 3,600 dólares adicionales para consumar el secuestro. Afirmó además que la investigación está siendo desviada para proteger a personas influyentes vinculadas al caso.
Las declaraciones del imputado reavivan las sospechas sobre la posible existencia de una red con participación de figuras del sector médico. Hasta el momento, las autoridades no han presentado acusaciones formales contra los señalados, lo que alimenta la percepción de encubrimiento en torno a uno de los casos más conmocionantes de la justicia dominicana.