Santo Domingo.– La reciente felicitación del presidente Luis Abinader al creador de contenido Santiago Matías, “Alofoke”, por el impacto de sus proyectos mediáticos, ha generado una ola de comentarios en distintos sectores, luego de que se señalara la ausencia de un reconocimiento público al jurista Eduardo Jorge Pratts, quien fue admitido como miembro de número en la Academia Dominicana de Ciencias.
La crítica surgió durante el programa radial El Gobierno de la Mañana, donde se destacó que el ingreso de Jorge Pratts a la Academia representa uno de los más altos reconocimientos en el ámbito científico e intelectual del país, debido a los rigurosos requisitos y a la trayectoria que se exige para formar parte de esta institución. Para algunos comunicadores, este tipo de logros debería ser visibilizado y respaldado con mayor énfasis por las autoridades, en tanto aportan al fortalecimiento del pensamiento crítico y al desarrollo del capital intelectual de la nación.
En ese sentido, se planteó la necesidad de que desde el Estado se promueva una cultura de reconocimiento hacia figuras vinculadas a la ciencia, la educación y la construcción de valores, como una vía para inspirar a las nuevas generaciones. Asimismo, se hizo un llamado a priorizar los referentes positivos y a reforzar el papel de las instituciones académicas en la vida pública del país, entendiendo que el desarrollo social depende no solo de obras físicas, sino también de la formación humana y moral de la sociedad.
Asimismo, distintas voces del ámbito académico y profesional recordaron que la Academia Dominicana de Ciencias ha sido, por décadas, un espacio reservado para personalidades con aportes excepcionales al conocimiento, la investigación y el pensamiento nacional. Por ello, consideraron que el ingreso de Eduardo Jorge Pratts no solo representa un logro personal, sino también un motivo de orgullo para el país, al tratarse de un dominicano cuya trayectoria ha trascendido las fronteras en materia jurídica, constitucional y académica.
Finalmente, plantearon que el debate abierto a raíz de esta situación debe servir como reflexión para las autoridades y la sociedad en general sobre los modelos que se están promoviendo desde los espacios públicos. Resaltaron la importancia de equilibrar el reconocimiento a figuras del entretenimiento con el respaldo a los aportes científicos, educativos y culturales que contribuyen de manera directa al desarrollo sostenible y al fortalecimiento de la identidad nacional.