Atlanta, EE. UU. – Un avión de la aerolínea Delta con 200 pasajeros a bordo abortó su despegue este viernes en el Aeropuerto Internacional de Atlanta luego de que uno de sus motores comenzara a incendiarse. El incidente se produjo mientras la aeronave se preparaba para despegar hacia su destino.

Según reportes y videos difundidos, se observó fuego saliendo del motor afectado, lo que llevó a los pilotos a mantener el aparato en tierra de inmediato, aplicando todos los procedimientos de seguridad establecidos por la aerolínea y la autoridad aeroportuaria.

La compañía aérea confirmó que ningún pasajero ni miembro de la tripulación resultó herido durante la emergencia. Delta aseguró que la aeronave será sometida a una exhaustiva inspección de mantenimiento antes de volver a operar.

Las autoridades aeroportuarias y la aerolínea indicaron que se están investigando las causas del incendio en el motor, mientras los pasajeros fueron atendidos y reubicados en vuelos posteriores. La situación generó retrasos temporales en la pista, pero se controló sin mayores incidentes.

En casos de incendio en un motor durante el despegue, la prioridad principal es mantener la calma y seguir las instrucciones de la tripulación. Los pilotos están entrenados para abortar el despegue de manera segura, aplicar los frenos, apagar el motor afectado y garantizar que la aeronave permanezca estable en tierra. Los pasajeros deben permanecer sentados con el cinturón de seguridad abrochado, evitando moverse o intentar salir de la cabina hasta que la tripulación confirme que es seguro evacuar.

Una vez controlada la emergencia, la tripulación puede ordenar la evacuación de manera organizada utilizando las rampas de emergencia si fuese necesario. Es importante escuchar atentamente las indicaciones, mantener la calma y no llevar objetos personales, para no entorpecer el flujo de salida. Los aeropuertos y aerolíneas cuentan con personal y protocolos de emergencia que incluyen bomberos y personal de primeros auxilios para asistir de inmediato a los pasajeros y evaluar cualquier riesgo adicional.