El comunicador Aníbal Díaz lanzó fuertes críticas contra oficiales y sectores vinculados a la Policía Nacional que, según afirmó, estarían recurriendo a maniobras “desleales” y “absurdas” para presionar cambios en la jefatura de la institución. Durante su intervención en El Gobierno de la Mañana, Díaz advirtió que algunos aspirantes a dirigir el cuerpo del orden están promoviendo acciones que comprometen la estabilidad interna y la autoridad del actual director, el mayor general Ramón Antonio Guzmán Peralta.
Díaz señaló que, históricamente, cada temporada de posibles cambios en la comandancia policial ha estado acompañada de intentos de generar tensión, violencia o campañas soterradas para debilitar al incumbente. Sin embargo, destacó que en esta ocasión se observan métodos nuevos —y más “civilistas”— como emplazamientos legales o presiones públicas, que, aunque menos violentas, siguen revelando la intención de ciertos grupos de “crear crisis solo por un cargo”.
El comunicador fue enfático al afirmar que quienes se prestan a estas prácticas quedan moralmente inhabilitados para dirigir una institución que se encuentra en un proceso interno de transformación y reformas. “Si un general tiene que montar escenarios, agitar conflictos o desestabilizar la institucionalidad para aspirar al mando, ese oficial se descalifica solo”, sostuvo. Agregó que ningún presidente debería ceder ante presiones “ridículas” ni permitir que ambiciones personales condicionen decisiones amparadas en la Constitución.
Díaz defendió el desempeño del mayor general Guzmán Peralta, resaltando su lealtad al presidente Luis Abinader, su capacidad gerencial y su compromiso con los planes de reforma policial. Consideró que interrumpir el proceso de transformación con un cambio improvisado podría revertir avances logrados en organización, disciplina y control interno. Asimismo, cuestionó la participación de comunicadores y asesores que, según dijo, “alimentan genialidades” y estrategias destinadas a manipular el clima institucional en favor de determinados candidatos.
El comunicador concluyó enfatizando que la designación del jefe de la Policía es una prerrogativa exclusiva del presidente, quien posee la visión completa para evaluar desempeño y continuidad. “El que hace cualquier cosa por un cargo no debe ser colocado en ese cargo”, reiteró Díaz, insistiendo en que la ética, la estabilidad y la institucionalidad deben prevalecer sobre intereses personales en una institución tan sensible para la seguridad ciudadana.