En su segmento habitual, Trompo Loco volvió a describir con humor y crudeza el proceso electoral dominicano. A pocos días de los comicios, el comentarista recordó que las elecciones no solo son un ejercicio de democracia, sino también un retrato de la cultura popular, llena de personajes, tensiones y anécdotas que se repiten cada cuatro años en cada colegio electoral del país.
Con su estilo jocoso, Trompo Loco destacó cómo desde la madrugada se siente “una tranquilidad sospechosa” que precede el ajetreo de las urnas. Señaló las caravanas de camiones que trasladan votantes, los vendedores ambulantes que convierten el proceso en un mercado improvisado y el intercambio de favores y dinero que muchos aún asocian al acto de sufragar. “Ese día se ve de todo, desde la doña que se marea hasta el que no aparece en el padrón”, comentó entre risas.
El analista cerró con un mensaje serio entre el tono satírico. Recordó que, a pesar de los vicios del sistema, el voto sigue siendo la herramienta que define el rumbo de los próximos cuatro años. “No voten con la barriga, voten con la cabeza para que el corazón se lo agradezca”, expresó, dejando su llamado al civismo y la conciencia ciudadana en un momento decisivo para la nación.