San José de Colinas, Santa Bárbara – Orlando Rivera Perdomo, un carismático hombre de 82 años y propietario del icónico “Bar Bon”, ha sorprendido a su comunidad y a las redes sociales con una decisión inusual: construir su propia tumba en posición vertical para ser enterrado de pie.

Rivera Perdomo, conocido por su admiración hacia figuras como Ernesto “Che” Guevara, explicó su decisión con una mezcla de reflexión y humor: “No quiero que me entierren acostado. No es porque no quiera volver a la tierra, sino que hay que distinguirse en la muerte, ya que en vida a uno ni le paran bola”.

La tumba, diseñada por el propio Rivera, cuenta con una estructura especial en su interior que sostiene el ataúd en posición vertical, con argollas y ganchos para evitar su colapso. Además, planea colocar un busto con su imagen en la parte superior, acompañado de mensajes grabados que reflejan su filosófica visión de la vida y la muerte.

Su decisión se basó en la observación de cómo muchas tumbas quedan en el olvido con el tiempo. “Los que entierran terminan olvidados, mientras que, de esta forma, la situación es diferente”, aseguró.

Rivera también ha dispuesto que, el día de su despedida, sus amigos y familiares lo carguen en hombros hasta su última morada, sin la presencia de un carro fúnebre. Asimismo, ha solicitado que su cuerpo no sea llevado a la iglesia, sino que le den un recorrido por el pueblo antes de su entierro.

Su familia ha manifestado su compromiso de cumplir sus deseos al pie de la letra. “Es su voluntad y nosotros estamos dispuestos a complacerlo”, afirmaron.

La inusual decisión de Orlando Rivera ha generado sorpresa y reacciones diversas en la comunidad, donde muchos consideran su tumba como la más extraña del mundo. Sin embargo, para él, se trata de una forma única de desafiar la muerte y dejar un legado imborrable en su pueblo.