El programa Cero es Tres volvió a captar la atención del público con una de sus populares cámaras ocultas, esta vez protagonizada por un supuesto indigente que puso a prueba la reacción de los transeúntes. La escena se desarrolló en plena vía pública, donde el actor caracterizado de mendigo utilizaba un palo para simular que intentaba asustar a las personas que pasaban cerca.
Entre miradas de desconcierto, pasos acelerados y carcajadas nerviosas, los peatones reaccionaban con sorpresa al ver al hombre acercarse de manera inesperada. Aunque todo se trataba de una broma planificada, el impacto inicial fue suficiente para generar momentos de tensión y risas por igual, característicos del estilo del programa.
Este tipo de dinámicas se ha convertido en un sello de Cero es Tres, que apuesta por el humor callejero y la interacción directa con el público como fórmula para entretener y conectar con la audiencia. La cámara oculta del “indigente bromista” se suma así a la larga lista de ocurrencias que han hecho del espacio uno de los favoritos en la televisión local.
