El ciudadano italiano Michael Julián denunció públicamente haber sido víctima de amenazas de muerte por parte de su vecina Soraya Lara, en represalia por instalar cámaras de seguridad en el área de parqueo de la torre Eduardo Galán, ubicada en el sector Alma Rosa Primera. Según relató, ha interpuesto múltiples querellas en la Fiscalía de Invivienda, pero afirma que las autoridades no han respondido a su llamado.

Julián explicó que Soraya se opone abiertamente a la colocación de cámaras, al parecer por temor a que ciertos comportamientos queden registrados y se hagan públicos. “Hace todo tipo de acoso o crimen para que me vaya y quite mi cámara”, aseguró. Según su versión, el pasado 12 de marzo en la noche, su vecina destruyó una de las cámaras como provocación para que él bajara al lugar, con la supuesta intención de agredirlo con un arma de fuego que, a pesar de su denuncia formal, la Fiscalía aún no le ha retirado.

Ambos residen en la misma torre, lo que ha generado un ambiente de tensión y temor. Julián pide protección a las autoridades y una actuación más firme por parte del Ministerio Público. “Si algo me pasa, ya están advertidos”, dijo, dejando constancia de su preocupación por su integridad física.