En medio del profundo luto que embarga a la República Dominicana tras la tragedia ocurrida en el club nocturno Jet Set, autoridades rindieron honores póstumos a dos altos oficiales de la Policía Nacional que perdieron la vida en el colapso: el general retirado José Luis Domínguez y el coronel José Oviedo Maldonado, este último director del Hospital de la Policía Nacional.
Los restos de ambos oficiales fueron velados en la funeraria Jardín Memorial, donde se congregaron miembros de distintas instituciones, familiares y amigos para darles el último adiós. El dolor se hizo sentir no solo entre los presentes, sino en todos los estamentos de la sociedad dominicana.
“La tarea más difícil que he tenido en 20 años al frente del COE”, confesó entre lágrimas Juan Manuel Méndez, director del Centro de Operaciones de Emergencias, al referirse al manejo de esta tragedia.
El director general de la Policía Nacional, mayor general Ramón Antonio Guzmán Peralta, calificó como “una pérdida irreparable” la muerte del coronel Maldonado. “Era más que un doctor. Era un filántropo, un hombre humilde, con una vocación inquebrantable de servicio. No importaba la hora, él siempre respondía cuando se le necesitaba”, expresó.
Sobre el general José Domínguez, quien se encontraba retirado, Guzmán Peralta destacó su larga y honorable trayectoria dentro del cuerpo del orden. “Fue subdirector de Investigaciones Criminales, inspector general de la institución y un oficial con una carrera brillante que deja una huella imborrable en la Policía Nacional”, señaló.
A la tragedia también se suma la pérdida de seis médicos, incluyendo al propio coronel Maldonado. El presidente del Colegio Médico Dominicano, Waldo Ariel Suero, lamentó profundamente el hecho y pidió apoyo psicológico urgente para las familias afectadas. “Hemos perdido siete médicos. Esto ha tocado a todas las áreas profesionales. El país está de luto y vive una depresión psicoemocional colectiva. Exigimos a las autoridades sanitarias y de construcción que se implementen medidas preventivas serias para evitar que desastres como este vuelvan a repetirse”, indicó.
Durante los actos fúnebres, los uniformes blancos de los médicos y los grises de los policías se entremezclaron en un mismo dolor. Según reportes de la funeraria Jardín Memorial, más del 90% de los velatorios realizados actualmente corresponden a víctimas del colapso de Jet Set.
Entre ellas también se encuentra una ciudadana venezolana que asistía al evento y cuyos restos fueron expuestos mientras se espera la llegada de sus familiares desde Venezuela. El cuerpo del coronel José Oviedo Maldonado fue trasladado a su natal Hato Mayor para recibir sepultura, mientras que el general José Luis Domínguez fue sepultado en el cementerio Puerta del Cielo en la capital.