Verón–Punta Cana–Bávaro. — Un incendio de gran magnitud registrado la madrugada de este martes 30 de diciembre de 2025, alrededor de las 3:20 a. m., redujo a cenizas al menos 28 viviendas, así como un colmado y dos tiendas, en la comunidad de Villa Playwood, tomando como referencia el play deportivo del sector, en el distrito municipal Verón–Punta Cana–Bávaro.

De acuerdo con informaciones preliminares, todas las edificaciones afectadas estaban construidas en madera y zinc, lo que facilitó la rápida propagación de las llamas y agravó los daños materiales. Unidades del Cuerpo de Bomberos de Verón Punta Cana–Bávaro acudieron al lugar y trabajaron por varias horas para controlar el siniestro, logrando evitar que el fuego se extendiera a otras zonas. Hasta el momento no se han reportado personas heridas.

En otro hecho separado, un incendio registrado en un área verde del sector Los Ranchitos, en el mismo distrito municipal, fue sofocado en su totalidad por los bomberos. El evento ocurrió el pasado domingo 28 de diciembre, alrededor de las 4:49 de la tarde, en las proximidades del colmado Los Rosales, donde fue desplegada la unidad B-01 para controlar la quema.

Las autoridades informaron que este segundo incidente fue manejado sin mayores complicaciones y que no se registraron daños adicionales. Asimismo, reiteraron el llamado a la población a tomar medidas preventivas, especialmente en zonas vulnerables con construcciones de materiales inflamables.

Recomendaciones

Ante una situación como un incendio de gran magnitud, lo primero es priorizar la vida. Se debe evacuar de inmediato el área afectada, mantener la calma y ayudar a niños, adultos mayores y personas con discapacidad a salir a un lugar seguro. Es fundamental no intentar salvar pertenencias, evitar regresar a la vivienda una vez fuera y llamar de inmediato a los organismos de emergencia, como el Cuerpo de Bomberos y el 9-1-1. Si el humo es intenso, se recomienda desplazarse agachado y cubrir nariz y boca con un paño húmedo.

Una vez controlado el incendio, las personas afectadas deben seguir las instrucciones de las autoridades, no ingresar a las estructuras dañadas por riesgo de colapso y reportar cualquier foco activo. También es importante acudir a los organismos de asistencia social y comunitaria para recibir apoyo, documentar las pérdidas y mantenerse informados por canales oficiales. La prevención posterior incluye revisar instalaciones eléctricas, evitar conexiones improvisadas y participar en jornadas de orientación para reducir riesgos futuros.