SANTO DOMINGO.– La Fuerza del Pueblo encabezó este domingo una masiva demostración de fuerza en las calles de la capital, durante una marcha caravana que el expresidente y líder de esa organización, Leonel Fernández, calificó como un “plebiscito anticipado” de lo que, asegura, ocurrirá en las elecciones de 2028. Entre consignas y banderas verdes, Fernández advirtió al Gobierno que “vaya recogiendo sus maletas”, afirmando que el pueblo decidirá un cambio en primera vuelta.
Durante el recorrido de casi tres horas por los barrios populosos de la parte alta de Santo Domingo, Fernández sostuvo que la multitud reunida refleja el creciente descontento ciudadano con el alto costo de la vida y la precariedad económica. Aseguró que productos básicos como el agua, el chocolate y el café han experimentado incrementos desproporcionados desde 2020, afectando directamente a los hogares dominicanos.
El exmandatario también criticó el aumento del subsidio eléctrico, que según afirmó pasó de 58 mil a 98 mil millones de pesos, responsabilizando al Gobierno por lo que consideró “ineptitud e incapacidad” en las distribuidoras eléctricas. Fernández reiteró su propuesta de una indexación salarial que, según dijo, beneficiaría a más de 700 mil trabajadores.
La actividad, colmada de carteles, consignas y simpatizantes, culminó en la avenida Duarte, donde dirigentes y ciudadanos manifestaron que el hambre, la inflación y el deterioro económico los empujan a protestar. La Fuerza del Pueblo aseguró que esta es solo la primera gran movilización de una agenda nacional que continuará en las próximas semanas, convencida de que el “descontento social será determinante” en el proceso electoral por venir.
Además de las críticas económicas, Fernández señaló que la actual administración ha fallado en atender las necesidades más urgentes de la población, mencionando fallas en servicios básicos como electricidad, agua potable y seguridad ciudadana. Indicó que estos problemas, sumados al encarecimiento de la canasta básica, han provocado que miles de familias vivan en constante incertidumbre. A su juicio, la masiva asistencia a la marcha refleja “un país que despertó y decidió no quedarse callado”.
Los dirigentes de la Fuerza del Pueblo aseguraron que esta demostración marca el inicio de una ofensiva política que recorrerá todo el país. Afirmaron que movilizarán sus estructuras en cada provincia para “organizar al pueblo” de cara a lo que consideran una batalla decisiva en 2028. Mientras tanto, reiteraron su llamado al Gobierno a escuchar el descontento de las calles, antes de que —según dijeron— la presión social haga inevitable un cambio de rumbo.
