Un incendio de grandes proporciones arrasó este martes un complejo residencial en el distrito Tai Po de Hong Kong, provocando la muerte de al menos 13 personas y dejando más de 15 heridos, mientras continúa la búsqueda de residentes desaparecidos que podrían permanecer atrapados entre los escombros.
El fuego se originó en el complejo de viviendas Wang Fuk Court y se extendió con rapidez a varios de sus edificios, alimentado por los andamios de bambú y las cubiertas utilizadas en obras de renovación, estructuras que, según expertos, contribuyeron a la aceleración de las llamas.
Debido a la magnitud del desastre, las autoridades elevaron la alerta a nivel 5, la máxima clasificación en la escala de emergencias contra incendios en Hong Kong.
Cifras de la tragedia
-
13 fallecidos confirmados
-
Más de 15 heridos, varios en condición crítica
-
Más de 700 habitantes evacuados hacia centros de refugio
El Departamento de Bomberos movilizó una operación masiva con más de 120 unidades de emergencia y decenas de ambulancias, trabajando durante horas para controlar el fuego y rescatar a los atrapados.
Un complejo vulnerable
Wang Fuk Court forma parte de un esquema de vivienda social que acoge a miles de residentes, muchos de ellos adultos mayores. La tragedia reabre críticas sobre los riesgos presentes en zonas de renovación urbana, donde el uso de andamios de bambú es frecuente por su bajo costo y facilidad de montaje, pese a su vulnerabilidad al fuego.
Mientras los equipos de rescate continúan sus labores, las autoridades han iniciado investigaciones para determinar las causas del siniestro y evaluar posibles fallos en las medidas de seguridad y evacuación.
La prioridad, aseguran, sigue siendo salvar vidas, asistir a los heridos y garantizar refugio a las familias que han perdido sus hogares en uno de los incendios más devastadores registrados recientemente en Hong Kong
