La tranquilidad de los residentes del este de Oakland, California, se quebró tras una serie de redadas que destaparon una operación de cultivo y distribución de marihuana vinculada al cártel de Sinaloa. Las autoridades allanaron al menos 10 casas, muchas de ellas en zonas residenciales y cerca de una escuela primaria, desmantelando lo que describen como una red criminal que operaba a plena luz del día.
El operativo, realizado con equipos antimotines y francotiradores, dejó al menos 15 detenidos, la mayoría de origen mexicano. Se confiscaron cientos de libras de marihuana, varias armas de alto calibre, otras drogas y casi un millón de dólares en efectivo. Los investigadores creen que los cárteles recurren a este tipo de producción local para reducir costos y evitar el riesgo de transportar drogas a través de la frontera.
Vecinos de la zona expresaron su miedo y frustración, especialmente al descubrir que una de las casas allanadas estaba justo frente a una escuela que celebraba una graduación el día de la redada. Expertos señalan que esta operación podría ser solo el inicio, ya que temen que existan más viviendas utilizadas como centros de producción y distribución en el área.