Después de 500 años de incertidumbre, un nuevo análisis de ADN ha revelado sorprendentes detalles sobre los orígenes de Cristóbal Colón, el explorador del siglo XV conocido por su papel en el descubrimiento de América. El documental “Colón ADN, su verdadero origen”, producido por RTVE, presenta 22 años de investigación liderada por el forense y catedrático de la Universidad de Granada, José Antonio Lorente.

Los hallazgos sugieren que Colón era de origen judío sefardí y que podría haber nacido en el territorio del arco mediterráneo o en las Baleares, áreas bajo la corona hispana de Aragón. Esta conclusión contradice la teoría tradicional que sostiene que Colón era genovés, un argumento que había sido objeto de debate entre historiadores durante años, especialmente considerando que en Génova no existía una comunidad judía significativa en aquella época.

El análisis se llevó a cabo examinando restos óseos y documentos, y se centró en los restos que se encuentran en la Catedral de Sevilla, reconocida como el lugar de descanso final de Colón, a pesar de las disputas sobre su enterramiento. Los investigadores compararon estos restos con los de parientes y descendientes conocidos, obteniendo muestras de ADN tanto del explorador como de su hijo, Hernando Colón.

Según Lorente, “tenemos ADN de Cristóbal Colón, muy parcial, pero suficiente. También tenemos ADN de Hernando Colón, su hijo”. Este análisis reveló que tanto el cromosoma Y (masculino) como el ADN mitocondrial (transmitido por la madre) de Hernando presentan rasgos compatibles con un origen judío.

Estos nuevos datos no solo reescriben la historia de uno de los personajes más controvertidos de la historia, sino que también abren un debate sobre la identidad y el legado de Colón, un tema que ha sido objeto de intensa discusión en múltiples países. La revelación de su posible origen judío sefardí añade una capa de complejidad a la narrativa tradicional y ofrece una perspectiva fresca sobre la figura histórica de Colón.