La cantante urbana Milka la más dura ofreció ayer en el programa Sábado Extraordinario su primera declaración pública, tras ser vinculada a una supuesta campaña difamatoria contra su colega Melymel. Acompañada por sus abogados, Milka aseguró que la acusación en su contra carece de fundamento legal y que todo se trató de un intento deliberado por afectar su imagen y la de su familia. La artista explicó que en su momento prefirió no declarar por tratarse de un tema delicado, pero que ahora, con el caso archivado por el Ministerio Público, puede hablar con claridad.
Según detallaron sus representantes legales, el informe policial que dio origen a los allanamientos en las residencias de los padres y hermana de Milka “fue viciado”, pues las direcciones IP citadas no correspondían a los domicilios mencionados ni a los dispositivos señalados. A su vez, recalcaron que ni la denuncia de Melymel ni la investigación del DICAT arrojaron evidencia alguna que vinculara a Milka con las publicaciones ofensivas. “No hay pruebas, no existe ninguna acusación formal contra Milka. El caso ha sido archivado”, afirmó el abogado Carlos Felipe.
Finalmente, Milka lamentó que esta situación la haya apartado de lo que más le apasiona: su música. “Es muy triste que en vez de estar aquí hablando de mis proyectos artísticos, tenga que estar aclarando mentiras. Pero gracias a Dios todo quedó demostrado”, concluyó la cantante, dejando claro que piensa tomar acciones legales por los daños ocasionados a su reputación.
