La comunidad de Moca está consternada tras el fallecimiento de Jander Antonio Ramírez, un niño de apenas 4 años, quien murió durante un procedimiento de circuncisión realizado en el Centro de Especialidades Materno-Infantil de esa ciudad. Según el informe preliminar del médico legista que practicó el levantamiento del cadáver, la causa probable del deceso fue un choque anafiláctico, es decir, una reacción alérgica severa a alguno de los medicamentos administrados durante la intervención quirúrgica. No obstante, aún se espera el informe oficial del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF), con sede en Santiago.

El hecho ha generado profunda indignación entre familiares y vecinos, quienes han denunciado falta de transparencia por parte del centro médico. “Ni siquiera nos dieron un diagnóstico, ni un acta de defunción”, expresó con dolor un allegado del menor. La familia asegura que no recibió explicaciones claras por parte del personal médico tras el suceso, lo que ha incrementado la tensión y la desconfianza en torno al manejo del caso.

El cuerpo del pequeño Jander fue sepultado este miércoles en el Cementerio Municipal de Moca, tras una misa de cuerpo presente celebrada en la capilla San Miguel. Mientras tanto, la comunidad y los familiares esperan respuestas oficiales y una investigación profunda que determine si hubo negligencia médica o fallas en los protocolos de seguridad durante el procedimiento.