Un violento asalto ocurrido en un salón de belleza del sector INVI, en Santo Domingo, dejó a varias personas afectadas emocionalmente, especialmente a un niño de siete años, a quien los delincuentes le arrebataron su tableta electrónica en medio de la confusión. Según testigos, dos hombres —uno a pie y otro en una motocicleta— irrumpieron en el local mientras varias clientas y trabajadoras se encontraban en servicio. El hecho estuvo a punto de terminar en tragedia cuando el menor se resistió a entregar el dispositivo.
“Él no sabía que era un atraco, y forcejeó con el ladrón. La madre le gritaba que se lo diera, pero el niño lloraba desconsolado”, relató una de las testigos. Además del dispositivo, los atracadores despojaron a las presentes de carteras, celulares, dinero en efectivo y productos personales. Uno de ellos habría simulado estar necesitado, pidiendo ayuda antes de anunciar el asalto y exigir que “todo el mundo estuviera tranquilo”.
El asalto dejó una profunda sensación de impotencia y miedo entre las víctimas, especialmente por el impacto emocional en los menores que presenciaron el hecho, incluyendo un bebé de apenas un mes. Residentes de la zona exigen mayor patrullaje policial y medidas de seguridad que prevengan este tipo de hechos que, además de materiales, dejan secuelas psicológicas difíciles de reparar.