Washington, EE. UU. — En una impactante declaración que ha encendido las alarmas en los círculos de seguridad de Estados Unidos, un exagente del FBI aseguró que “terroristas iraníes ya están aquí”, en referencia a supuestas células dormidas del régimen de Irán activas dentro del país. Las palabras fueron emitidas durante una entrevista transmitida por medios internacionales y han generado una fuerte reacción entre autoridades y expertos en seguridad nacional.
Según el exfuncionario, identificado como especialista en inteligencia antiterrorista, las recientes tensiones entre Estados Unidos e Irán, agravadas por los bombardeos estadounidenses a instalaciones nucleares iraníes, han aumentado el riesgo de ataques dentro del territorio norteamericano. “Estamos ante la posibilidad real de que Irán active sus redes durmientes para ejecutar represalias de alto impacto”, advirtió.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) no ha confirmado amenazas específicas, pero sí elevó el nivel de alerta. Funcionarios han revelado que en los últimos meses se ha registrado un aumento de ciudadanos iraníes cruzando la frontera sur de EE. UU., lo que ha motivado investigaciones para descartar infiltraciones. Aunque no se han presentado cargos, las autoridades admiten que la situación es “delicada y bajo análisis constante”.
Por su parte, el FBI emitió un breve comunicado en el que confirma que monitorea “potenciales amenazas relacionadas con actores estatales hostiles”, y que trabaja de manera conjunta con agencias aliadas para detectar cualquier indicio de ataque planeado. El exagente también afirmó que Irán podría estar utilizando vínculos en América Latina para entrenar y movilizar operativos hacia EE. UU., en colaboración con grupos armados y redes criminales.
Diversos expertos en geopolítica han respaldado la preocupación, recordando que Irán ha usado estrategias asimétricas en el pasado. “No necesitan grandes ejércitos ni misiles; una célula dormida con conocimiento del terreno puede generar caos y miedo con pocos recursos”, explicó el analista Mark Fitzgerald. Agregó que los llamados ‘sleeper cells’ no se activan hasta que reciben la orden directa desde Teherán.
Ante esta situación, varios legisladores han exigido al gobierno federal reforzar la seguridad interna y la cooperación con países aliados. También han instado a tomar medidas preventivas para proteger instalaciones críticas, aeropuertos, estaciones de tren y eventos multitudinarios. Mientras tanto, la ciudadanía sigue con atención esta alarmante advertencia que, aunque no confirmada oficialmente, reaviva temores de nuevas formas de terrorismo en suelo estadounidense.
