Santo Domingo. – La comunicadora Diulka Pérez alertó este jueves sobre la grave situación sanitaria que afecta a los residentes de Guachupita, quienes reciben agua potable mezclada con aguas residuales, lo que representa un riesgo inminente para su salud. Según Pérez, el problema persiste desde hace más de una década y se intensifica con las lluvias, incrementando la posibilidad de brotes de enfermedades como leptospirosis y cólera.
La periodista explicó que las viviendas de la zona, muchas construidas de manera improvisada, no cuentan con un sistema cloacal adecuado, lo que provoca que el agua que llega a los hogares sea marrón y maloliente. Los vecinos han denunciado la situación reiteradamente, pero las autoridades aún no han implementado soluciones efectivas, a pesar de reconocer que el drenaje pluvial de la zona requiere inversiones millonarias para ser rehabilitado.
Pérez insistió en la urgencia de atender la crisis sanitaria, especialmente por el bajo poder adquisitivo de las familias afectadas, quienes no pueden costear agua embotellada y dependen del suministro de la llave. “Si el agua de la llave viene contaminada con materia fecal, estamos ante un riesgo grave que puede terminar en muertes rápidas por leptospirosis u otras enfermedades”, advirtió. La comunicadora hizo un llamado a las autoridades a intervenir de inmediato para proteger la salud de miles de personas en Guachupita y zonas aledañas.
Pérez destacó que la problemática no se limita solo a Guachupita, sino que afecta áreas cercanas como Hualey y Los Guandules, donde los sistemas de drenaje y alcantarillado también son insuficientes. Señaló que, ante cualquier temporada de lluvias, el riesgo de contaminación aumenta, y con él, la probabilidad de brotes epidémicos que podrían colapsar los hospitales locales, generando un gasto elevado al Estado y poniendo en peligro la vida de los residentes.
Asimismo, la comunicadora hizo un llamado a la planificación urgente de soluciones permanentes, incluyendo la reparación de los sistemas cloacales y el suministro de agua segura, para garantizar que las familias no tengan que exponerse diariamente a enfermedades potencialmente mortales. Pérez enfatizó que esta intervención no puede posponerse, ya que la salud de miles de dominicanos depende de acciones inmediatas.
