En Florida y otras partes del país, activistas están ofreciendo talleres a inmigrantes indocumentados para enseñarles cómo actuar en caso de redadas y posibles arrestos. A pesar de celebrarse un cumpleaños en una casa particular, la preocupación por las deportaciones motivó a la comunidad a aprovechar la ocasión para recibir capacitación sobre sus derechos.
Durante el taller, se destacó la importancia de memorizar números de familiares y amigos, así como saber cuándo guardar silencio y pedir un abogado en caso de ser detenidos por autoridades migratorias. Carla, una trabajadora doméstica colombiana, compartió su experiencia personal y subrayó que, en el estado de Florida, solo se está obligado a dar el nombre, y nada más.
La organizadora del evento, Carla De Anda, quien forma parte de “The Right to Freedom”, explicó que estos talleres también se imparten en el consulado mexicano, ayudando a los inmigrantes a crear planes de emergencia y proteger sus derechos ante la policía y migración. Sin embargo, reconoció que el miedo a represalias ha dificultado reunir a la comunidad.
Para fomentar la confianza, las reuniones se realizan en casas privadas, donde los participantes se sienten más seguros y cómodos. A través de estos esfuerzos, los activistas buscan que, aunque sean pequeños grupos, puedan capacitar a suficientes personas para evitar que sufran una deportación.
