En un análisis profundo y contundente, la comunicadora María Cristina Rodríguez expuso la grave amenaza que representa el crimen organizado en América Latina, al buscar influir en los procesos electorales y asegurar el control territorial y financiero mediante la violencia política. Su intervención, en el programa “El Rumbo de la Tarde”, destacó cifras alarmantes y un llamado urgente a la unión de líderes políticos y sociales para enfrentar esta crisis.
Rodríguez señaló que, según datos recopilados por la ONG Data Cívica y el Observatorio Ciudadano de Violencia Política, cerca de 500 políticos y líderes sociales han sido víctimas de asesinatos o violencia física en actos públicos solo entre 2024 y los primeros meses de 2025. Países como México, Colombia, Ecuador, Brasil y Honduras encabezan estas cifras, que podrían ser mayores debido a la falta de datos centralizados en toda la región.
El caso reciente de Colombia, con el asesinato del senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay, es una muestra clara de cómo el crimen organizado no solo busca controlar territorios mediante el narcotráfico y las pandillas, sino también incidir directamente en las decisiones políticas y constitucionales de los países latinoamericanos.
María Cristina Rodríguez también advirtió sobre la preocupante alianza entre grupos criminales y comunidades indígenas en Ecuador, un fenómeno que complica aún más la lucha contra el crimen organizado debido a factores sociales y culturales que dificultan la acción de las autoridades.
La comunicadora hizo un llamado para que los países latinoamericanos unan esfuerzos estratégicos y colaboren para disminuir la influencia del crimen organizado, que representa una grave amenaza para la democracia, la paz y el desarrollo de la región.
