Los vehículos de lujo incautados en el operativo contra el centro nocturno Casablanca fueron trasladados a otro lugar tras denuncias de que les habían robado los espejos retrovisores mientras permanecían estacionados en el Palacio de Justicia de Santiago. La fiscal titular Luisa Liranzo encabezó el movimiento de los automóviles, aunque no se ha revelado el nuevo destino para resguardar las evidencias.

La situación generó indignación, ya que no es la primera vez que se reportan sustracciones dentro de las instalaciones judiciales. Según denuncias previas, incluso oficinas y jurisdicciones inmobiliarias han sido víctimas de robos en el recinto, lo que pone en cuestionamiento las medidas de seguridad en torno a las pruebas de casos de alto perfil.

El caso Casablanca sigue bajo investigación luego de que la fiscalía desmantelara una presunta red de trata de personas en el centro nocturno de Santiago, donde se rescataron 45 mujeres extranjeras. Los vehículos incautados forman parte de las evidencias que podrían vincular a los imputados con la operación ilegal.