El romance más inesperado del verano ha salido a la luz: Pamela Anderson (58) y Liam Neeson (73) ya no esconden su conexión especial. La chispa se encendió durante el rodaje de la nueva versión de la comedia clásica The Naked Gun (Agárralo como puedas), y ha terminado por desbordarse más allá de los sets de grabación y alfombras rojas.

Durante el reciente estreno de la cinta en Londres, ambos sellaron con un beso —discreto pero lleno de complicidad— lo que hasta ahora era solo un rumor. La química entre ellos es innegable, y su historia ha capturado la atención del público, no solo por la diferencia de edad o su trayectoria artística, sino por el aire de redención que los rodea a ambos.

Pamela, quien ha hablado abiertamente de su pasado lleno de turbulencias personales, ha descrito la relación con Liam como “una conexión muy sincera y cariñosa”. Él, por su parte, ha dicho sentirse “locamente enamorado” (con su característico humor irlandés), y ha elogiado a la actriz por ser “divertida, sin ego y muy fácil de llevar”.

El romance, aunque sin confirmación formal, parece avanzar con paso firme. Una señal clara fue la presencia de sus hijos en el estreno en Nueva York: Pamela asistió con Brandon y Dylan, fruto de su matrimonio con el músico Tommy Lee, mientras que Neeson estuvo acompañado de sus hijos Michael y Daniel, nacidos de su relación con la fallecida Natasha Richardson.

Ambos actores llegan a esta etapa de su vida con cicatrices emocionales, pero también con una madurez que los hace aún más admirables. Tal vez por eso su historia ha resonado tan fuerte: ver a dos íconos de Hollywood encontrar ternura y alegría cuando nadie lo esperaba, es un recordatorio de que el amor no tiene edad… ni libreto.