En un operativo valorado en más de 100.000 dólares, Joaquín Archibaldo Guzmán Loera, alias El Chapo, fue trasladado bajo estrictas medidas de seguridad desde una cárcel en Manhattan hasta la Corte Federal de Brooklyn. Más de una docena de vehículos participaron en el convoy que custodiaba al líder del cartel de Sinaloa durante su segunda comparecencia ante la justicia estadounidense.
Durante la audiencia, la defensora pública de Guzmán Loera denunció las condiciones extremas de confinamiento de su cliente, quien pasa 23 horas diarias en una celda especial sin acceso a su esposa, Emma Coronel. La abogada mexicana de El Chapo también cuestionó la validez de los documentos de extradición, mientras la defensa solicitó autorización para contratar un abogado privado por posibles conflictos de interés.
El narcotraficante enfrenta 17 cargos, entre ellos narcotráfico, homicidio, secuestro y lavado de dinero, ante los cuales se declaró inocente. De ser hallado culpable, podría recibir cadena perpetua. La próxima audiencia fue programada para el 10 de mayo, fecha en la que se definirá la representación legal definitiva de Guzmán Loera.