
El Juzgado de la Instrucción del Distrito Judicial de Dajabón emitió una orden de arresto el pasado 13 de febrero contra Nino García de la Rosa, de 24 años, acusado de agresión sexual contra su propia tía de doce años. El aterrador incidente habría ocurrido en el distrito municipal Cañongo, según denunció el abuelo de la niña, quien es padre del presunto agresor.
En declaraciones al periódico El Nuevo Diario, el angustiado padre de la presunta víctima relató el momento en que su nieta habría sido dejada en casa de otra hija suya y cómo, según su testimonio, Nino habría aprovechado la ausencia de la madre para cometer el crimen. El progenitor exige justicia y que el acusado pague por sus actos.
La víctima de tan solo 12 años narró el espeluznante suceso que le ha tocado vivir a su tan corta edad, mostrando traumas imborrables como secuela del injusto acontecimiento.
Abuso sexual infantil
El abuso infantil en la República Dominicana, como en otros lugares del mundo, se refiere a cualquier acción o falta de acción que cause daño físico, emocional o sexual a un niño o niña. Este fenómeno puede manifestarse de diversas formas, y es una grave violación de los derechos de los menores.
Las formas de abuso infantil incluyen:
- Abuso Físico: Implica causar daño físico deliberado a un niño, ya sea mediante golpes, sacudidas, quemaduras u otras formas de agresión física.
- Abuso Emocional: Se refiere a comportamientos que afectan negativamente el bienestar emocional del niño, como el rechazo constante, la humillación, el aislamiento o la intimidación.
- Abuso Sexual: Incluye cualquier actividad sexual no consensuada con un niño. Esto puede involucrar tocamientos inapropiados, exposición a material sexual, explotación sexual o violación.
- Existen leyes y políticas que buscan proteger a los menores y castigar a quienes perpetran estos actos.
- Es fundamental que la sociedad fomente un entorno seguro para los niños, brinde apoyo a las víctimas y promueva la denuncia de cualquier forma de abuso. La colaboración entre las autoridades, organizaciones civiles y la comunidad en general es esencial para erradicar este problema y proteger el bienestar de los niños en la República Dominicana y en todo el mundo.