El alcalde de Nueva York, Eric Adams, se declaró no culpable este viernes en un tribunal de Manhattan, tras ser acusado de soborno y fraude. Adams enfrenta cargos federales que lo acusan de aceptar contribuciones ilegales para su campaña y viajes gratis al exterior, presuntamente ofrecidos por ciudadanos turcos y funcionarios extranjeros a lo largo de una década, con la intención de influir en el Gobierno de la ciudad.
Durante su comparecencia ante la magistrada Katharine Parker, Adams negó los cinco cargos presentados en su contra y prometió luchar por su inocencia, mientras permanece en el cargo. “No soy culpable, señoría”, declaró al tribunal.
El alcalde fue liberado bajo palabra, con la condición de no tener contacto con testigos o cualquier persona relacionada con el caso, además de mantenerse presente en las futuras audiencias. El tribunal ha advertido a Adams que no debe faltar a ninguna audiencia ni intimidar a nadie vinculado con el proceso legal.
A pesar de la creciente presión de algunos políticos que piden su renuncia, Adams mantiene su postura de seguir en el cargo. Su abogado ha anunciado que planean presentar una moción para desestimar todos los cargos, argumentando que el caso no tiene sustento. “Este ni siquiera es un caso real. Es el caso de corrupción en las mejoras de vuelos de las aerolíneas”, afirmó su abogado Spiro.
Adams, de 64 años, deberá regresar a la corte el próximo miércoles para continuar con el proceso judicial.