Gilberto Ventura Ceballos, alias “Betancur”, señalado como autor del asesinato de cinco jóvenes de ascendencia china en Panamá, se convirtió en uno de los criminales más buscados de la región. Junto a otros dos dominicanos, Bruján y Alcibíades Méndez, Ventura fue acusado de secuestro, homicidio y extorsión. Los cuerpos de las víctimas —Yessenia Argelis Loo Kam, Young Jian Wu, Sammy Zeng Chen, Joel Maurio Liu Wong y Georgina del Carmen Lee Chen— fueron encontrados enterrados en el mismo solar donde fueron asesinados. La crueldad del crimen estremeció al país y generó una respuesta inmediata de las autoridades panameñas.

Tras varios meses prófugo, Ventura fue capturado en 2011 en el sector de Andrés, Boca Chica, República Dominicana, luego de una intensa búsqueda. Al momento de su detención, presentaba cicatrices en las yemas de los dedos, resultado de una operación para borrar sus huellas dactilares, y se había teñido el cabello para ocultar su identidad. Las autoridades confirmaron además que utilizaba una identidad falsa y que se había casado en Panamá poco tiempo después de llegar al país. Su historial incluía una fuga previa en 2004, cuando escapó de una cárcel dominicana tras secuestrar a un comerciante chino.

No obstante, en diciembre de 2016, Ventura volvió a fugarse, esta vez de la cárcel panameña La Joya, considerada de máxima seguridad. La evasión reveló posibles complicidades internas, pues se encontraba bajo custodia cuando desapareció. La Interpol elevó su alerta de verde a roja, y la recompensa por su captura aumentó de 5 mil a 50 mil dólares. A la fecha, su paradero sigue siendo incierto, y las familias de las víctimas temen que el criminal vuelva a aparecer en República Dominicana, como ya lo hizo en el pasado.