En una entrevista telefónica que ha generado conmoción, el interno José Denis Salas Fernández, alias “Al Capone”, actualmente recluido en la cárcel de Cotuí, denunció supuestas ejecuciones extrajudiciales, redes de corrupción y complicidad entre autoridades penitenciarias y miembros de la Policía Nacional en la República Dominicana. Salas, quien cumple una condena de 20 años por homicidio, afirmó estar en régimen de aislamiento desde hace más de un año sin derecho a visitas, y sostuvo que teme por su vida tras revelar información comprometedora.

Durante la conversación, “Al Capone” vinculó la reciente muerte del recluso conocido como “Hob”, presunto líder de la banda Latin Kings, con una supuesta orden de asesinato encubierta como requisa carcelaria. Afirmó que el fallecido había tenido conexiones directas con oficiales policiales de alto rango, incluyendo al coronel Castro Castillo, hermano del jefe de la Policía Nacional. Según Salas, Hob era utilizado por agentes corruptos para operar redes criminales desde dentro y fuera del penal, lo cual —según sus declaraciones— motivó su eliminación para evitar filtraciones.

Salas también acusó directamente a exfuncionarios penitenciarios y aseguró tener información que podría comprometer a figuras de peso dentro del sistema judicial y político del país. Reclamó la intervención de organismos internacionales de derechos humanos, incluso mencionando haber contactado a entidades de Estados Unidos para pedir investigación y protección. La Procuraduría General aún no ha emitido respuesta oficial ante estas alegaciones.