Santo Domingo, R.D. — El comunicador Julio Martínez Pozo calificó como “autodestructivas” las recientes elecciones celebradas en el Consejo Económico y de Desarrollo Estratégico de Santiago (SEDES), asegurando que dichas votaciones dejaron a esa ciudad sin una entidad funcional para representar sus intereses estratégicos.“Santiago no debió haber celebrado esas elecciones autodestructivas… Hoy no hay SEDES en Santiago y lo voy a explicar”, afirmó el veterano comentarista, cuestionando la legitimidad y el propósito del proceso interno que, según él, fraccionó una institución clave para el desarrollo local.
Además, Martínez Pozo se refirió a las nuevas tarifas de inspección impuestas por el Ministerio de Vivienda y Edificaciones (MIVED), calificando los aumentos de hasta un 800% en algunos casos como una medida “desconectada de la realidad” del sector construcción. “El presidente dice que eso no va a impactar los costos de la vivienda, pero ¿qué incremento en una actividad económica no se refleja en el producto final? Eso es imposible”, indicó, al tiempo que advirtió que la resolución podría provocar resistencia legal y paralización de proyectos por parte de desarrolladores.
El comunicador también denunció que estas modificaciones se implementan sin suficiente consulta ni gradualidad, afectando a un sector que ya enfrenta múltiples desafíos económicos.
Asimismo, expresó preocupación por un borrador de resolución de la Superintendencia de Salud y Riesgos Laborales (SISALRIL) que introduce un modelo de per cápita diferenciado por nivel de riesgo. Según Martínez Pozo, esta propuesta pone en peligro la sostenibilidad de al menos seis Administradoras de Riesgos de Salud (ARS) pequeñas y favorece a las tres principales del sector.
“Eso lo que va a hacer es reconcentrar el pastel, quebrar ARS bien manejadas, y establecer una competencia desleal disfrazada de política técnica”, advirtió, citando la posición de ARS Yunén, una de las afectadas.
En otro orden, Martínez Pozo instó al Consejo Económico y Social (CES), que se reunirá esta semana, a centrarse en políticas que fomenten la formalización de la mano de obra dominicana y desalienten el clientelismo estatal, especialmente en el otorgamiento indiscriminado de seguros subsidiados.
“Estamos estimulando la vagancia con políticas sociales mal diseñadas… Hay que crear estímulos para el trabajo formal, no para sentarse en un parque a esperar una tarjeta”, sentenció.
Finalmente, denunció prácticas injustas en procesos de pensión de empleados públicos, especialmente en la Superintendencia de Seguros, alegando que se están promoviendo salidas por la vía de la DIDA con pensiones mínimas, mientras otros reciben pensiones privilegiadas por decreto.
La intervención de Martínez Pozo volvió a levantar polvo político y sectorial, fiel a su estilo crítico, directo y profundamente analítico sobre las decisiones que, a su juicio, afectan el rumbo del país.
