Céspedes explicó que la explotación sexual infantil es un tema que desnuda una cruda realidad.
Según la periodista, está realidad está íntimamente ligada a la pobreza y a la mercantilización de los menores.
Las memores aseguran que tiene reglas que cumplen a cabalidad.
El uso preservativo es imprescindible y la práctica del sexo oral, en la medida de lo posible, es nula.
La periodista entrevistó a dos jovencitas y ambas tienen hijos a pesar de su corta edad.
Céspedes informó que una de las niñas ha reconocido que es adicta y que gasta mucho dinero en bebidas alcohólicas.
Además, dijo que consume marihuana.
De acuerdo con Julissa, la explotación sexual a la que son sometidas las menores no es un secreto para las autoridades.
El tráfico sexual infantil es uno de los secretos mejor guardados y más oscuros de República Dominicana.
La pobreza, carencias y explotación llevan a que los niños se vean atraídos hacia un oscuro submundo que ofrece pocas salidas.
El tráfico sexual de niñas de 15 a 17 años se produce en las calles, parques y playas.
Mientras que los traficantes que operan en redes siguen empleando métodos para enmascarar sus actividades.