El cantante urbano Antonio Peter de las Rosas, conocido artísticamente como Omega El Fuerte, fue finalmente trasladado al penal de La Victoria para cumplir tres meses de prisión preventiva por cargos de violencia intrafamiliar. El artista fue visto saliendo del Palacio de Justicia de Ciudad Nueva, donde permanecía desde la semana pasada, cuando el juez José Alejandro Vargas dictó la medida de coerción. Aunque inicialmente se ordenó su reclusión en el Centro Correccional de San Pedro de Macorís, la falta de espacio obligó a las autoridades a reubicarlo.
A su salida del tribunal, Omega se mostró sereno y lanzó declaraciones cargadas de fe y desafío. “Yo estoy feliz porque Dios me dio un talento que el hombre no lo va a poder apagar”, expresó, evitando referirse directamente a las acusaciones que enfrenta. Al ser cuestionado por los medios sobre su defensa, se limitó a decir que continuará con su abogado, y negó tener sanciones por agresión, agregando: “La gente sabe lo que hay”.
El traslado de Omega ha generado reacciones mixtas entre sus seguidores, quienes han expresado apoyo incondicional en redes sociales, mientras otros exigen que se haga justicia. Esta no es la primera vez que el artista enfrenta cargos similares, lo que ha reavivado el debate sobre la responsabilidad de figuras públicas en casos de violencia de género y el papel de la justicia en estos procesos.
