Santiago.– La mañana del pasado jueves se vivieron momentos de tensión en el centro educativo Salustina Bans Bautista del sector Bellavista, cuando agentes de la unidad antipandillas acudieron tras detectarse que una estudiante llevaba una arma de fuego oculta en su mochila. El hallazgo generó preocupación entre padres, docentes y comunitarios, quienes exigen mayor control de seguridad en los accesos al plantel.

De acuerdo con el director del distrito escolar 08-05, Roberto Rosario, la menor —cuyo nombre se reserva por razones legales— explicó que llevó el arma como una forma de alertar a las autoridades sobre los presuntos abusos que enfrenta en su hogar. “Ella expresó que se sentía en peligro en su casa y que su intención era llamar la atención”, señaló Rosario. La menor fue puesta bajo custodia del Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia (CONANI), mientras la fiscalía da seguimiento al caso en coordinación con personal docente y psicólogos del centro.

Las autoridades han reiterado que en ningún momento el personal escolar estuvo en riesgo, pero subrayaron el impacto emocional del incidente en la comunidad educativa. Padres y tutores fueron exhortados a estar más atentos a las conductas de sus hijos, revisar mochilas y mantener una comunicación activa con los centros escolares. Celulares y dispositivos electrónicos continúan prohibidos dentro del plantel como parte de las medidas preventivas.

Arma de fuegos en menores de edad

El porte o posesión de un arma de fuego por parte de un menor de edad representa un grave riesgo tanto para el propio adolescente como para su entorno. En República Dominicana, la Ley para el Control y Regulación de Armas prohíbe expresamente que personas menores de 18 años porten, transporten o manipulen armas de fuego, sin importar la intención. Este tipo de situaciones suele generar gran alarma social, ya que puede poner en peligro la seguridad de estudiantes, docentes y familiares, además de evidenciar fallas en los mecanismos de prevención y control en hogares y centros educativos.

Cuando un menor es sorprendido con un arma, las autoridades deben intervenir de inmediato, no solo desde el punto de vista judicial, sino también con un enfoque psicosocial. Es fundamental investigar el origen del arma, las motivaciones del menor y su entorno familiar, ya que muchas veces estos casos están ligados a situaciones de violencia doméstica, negligencia o abuso. Intervenciones del Ministerio Público, CONANI y equipos interdisciplinarios son clave para garantizar la protección del niño o adolescente y evitar que este tipo de hechos se repitan.