Santo Domingo — A pesar de múltiples intentos fallidos por reformar el sistema penitenciario dominicano, el Estado ha hecho una nueva apuesta para cambiar el rumbo con la apertura de la ciudad penitenciaria Las Parras, que será inaugurada este próximo 10 de agosto como parte del denominado nuevo modelo de gestión penitenciaria.

El centro, ubicado en las afueras de Santo Domingo, recibirá en su primera etapa a unos 2,500 internos provenientes de la cárcel de La Victoria, considerada una de las más caóticas y peligrosas del país. La meta es alcanzar una capacidad de más de 8,500 privados de libertad en un entorno que promueva la disciplina, la salud mental, la reinserción social y, sobre todo, la dignidad humana.

Según un reporte especial presentado por CDN y desarrollado por el periodista Miguel Ángel Encarnación, más del 60 % de los privados de libertad en la República Dominicana viven actualmente en condiciones inhumanas: hacinados, sin acceso a programas educativos o de salud mental, y bajo el control de redes delictivas que replican estructuras de crimen organizado dentro de los recintos carcelarios.

El proyecto de Las Parras incluye la inversión en infraestructura segura y funcional, el fortalecimiento del personal penitenciario con estándares éticos y técnicos, y una extensión del modelo penitenciario moderno, con miras a lograr una verdadera transformación.

“Si lo rechazan y no se reinsertan, vuelven al delito. Y si vuelven al delito, vuelven al sistema”, comentó una fuente consultada por el reportaje, destacando la necesidad urgente de romper ese ciclo con una propuesta que incluya rehabilitación real, y no solo castigo.