En su programa Hilando Fino, el periodista Salvador Holguín analizó la creciente tensión interna dentro del Partido Revolucionario Moderno (PRM), la cual definió como “la manzana de la discordia” entre las dos principales figuras de esa organización: Hipólito Mejía y Luis Abinader. Según Holguín, tras las pasadas elecciones se ha iniciado dentro del partido un forcejeo por los puestos en las altas cortes y la Junta Central Electoral, posiciones que por ley corresponden a la principal fuerza opositora.

De acuerdo con su análisis, Hipólito Mejía promueve al jurista Salvador Ramos como representante del PRM ante estas instancias, mientras que Luis Abinader impulsa a Antoliano Peralta para el mismo propósito. Esta diferencia —más allá de un simple nombramiento— estaría alimentando una disputa más profunda por el control político del partido, e incluso ha dado pie a sectores que comienzan a promover el “retorno” de Mejía como candidato presidencial para el 2020, argumentando que Abinader fue “poco batallador” durante el pasado proceso electoral.

Holguín advirtió que la lucha por estas cuotas de poder en las instituciones del Estado podría erosionar la unidad del PRM si no se maneja con prudencia y liderazgo. A su juicio, el pulso entre Mejía y Abinader representa una amenaza real para la estabilidad de esa organización, que aún intenta consolidarse como una alternativa moderna frente al oficialismo.