Durante un seguimiento realizado hace meses en San Francisco de Macorís, el equipo de Máximo Peralta conversó en varias ocasiones con Diógenes Ferreira Gómez, propietario de una reconocida joyería de la ciudad. En aquel momento, el comerciante denunciaba que había sido víctima de un asalto donde perdió prendas, dinero en efectivo y mercancía de alto valor, reclamando que las autoridades no atendieron su caso con la diligencia necesaria.
Sin embargo, la situación dio un giro drástico este fin de semana. Una unidad policial acudió a su negocio para ejecutar una orden de arresto en su contra, tras ser acusado de agredir sexualmente a una menor de edad. Según informes oficiales, al llegar los agentes al establecimiento, Ferreira Gómez habría sacado un arma de fuego e intentado quitarse la vida disparándose en el rostro.
El herido fue trasladado de emergencia a un centro de salud, donde permanece bajo custodia policial. Las autoridades investigan tanto las circunstancias del presunto abuso sexual como el intento de suicidio, mientras la comunidad se mantiene sorprendida por el desenlace de un caso que meses atrás tenía a Ferreira Gómez en calidad de denunciante y no de imputado.