El comunicador Fausto Montes de Oca criticó duramente la persistencia del elevado déficit en el sistema eléctrico dominicano, el cual según explicó supera los 756 millones de dólares. Durante su comentario en Enfoque Final, Montes de Oca calificó de injusto que siempre se responsabilice a los sectores más vulnerables por las pérdidas en las empresas distribuidoras de electricidad (EDEs).
“¿Vamos a seguir culpando a los pobres del déficit que hay en el sistema eléctrico?”, se preguntó el analista, señalando que el verdadero problema radica en la falta de control, la evasión del pago y el fraude energético. Añadió que la energía se ha convertido en un tema político intocable, lo que impide aplicar soluciones efectivas para detener el despilfarro de fondos públicos.
Montes de Oca lamentó que año tras año el presupuesto nacional tenga que subsidiar el sistema eléctrico en lugar de destinar esos recursos a programas productivos, oportunidades para jóvenes o apoyo al emprendimiento femenino. “Ese dinero podría transformarse en desarrollo, pero se pierde por una cultura de impunidad y falta de voluntad para cobrar la energía servida”, afirmó.
El comentarista también cuestionó la falta de modernización en la red eléctrica y la ausencia de inversión en tecnologías que garanticen eficiencia. Concluyó diciendo que República Dominicana no puede seguir manteniendo un sistema que favorece el déficit, mientras el país pierde competitividad y oportunidades de crecimiento económico.
Montes de Oca enfatizó que la raíz del problema no está en la población más humilde, sino en la falta de una política energética seria y sostenible. Señaló que las pérdidas por fraude, conexiones ilegales y mala gestión administrativa en las empresas distribuidoras representan una carga que termina afectando a todos los dominicanos. “Mientras no se tomen decisiones firmes, el país seguirá subsidiando la ineficiencia con dinero que podría impulsar educación, salud o empleo”, expresó con tono crítico.
Asimismo, el comunicador advirtió que el déficit eléctrico pone en riesgo la estabilidad fiscal y la credibilidad internacional del país ante los organismos financieros. Llamó a las autoridades a asumir el problema con transparencia y sin tintes políticos, implementando medidas que promuevan el cobro justo y la eficiencia en la distribución. “El déficit energético no es un problema técnico, es un problema de voluntad política”, concluyó Montes de Oca.