Durante la ceremonia de graduación de la preparatoria “Felipe Carrillo Puerto” en Pijijiapan, Chiapas, una estudiante sorprendió a todos al utilizar su discurso para denunciar públicamente a varios docentes por acoso sexual. Frente a autoridades educativas, padres y compañeros, la joven señaló que algunos maestros realizan “miradas coquetas” y emiten “comentarios fuera de lugar” hacia las alumnas, creando un ambiente inseguro dentro del plantel.

En medio del acto solemne, la estudiante también cuestionó la falta de consecuencias para los implicados, afirmando que hay una cultura de encubrimiento entre los docentes. “Una gran parte de la plantilla son acosadores y defienden a sus cuates”, expresó con valentía, desatando reacciones inmediatas del público presente. Su testimonio generó un fuerte impacto en redes sociales, donde el video de su intervención se viralizó en cuestión de horas.

La Fiscalía General del Estado de Chiapas anunció que ya inició una investigación formal tras la denuncia. A través de un comunicado, las autoridades confirmaron la detención de un maestro identificado como “José N.”, acusado de acoso sexual, y detallaron que ya se han recopilado pruebas psicológicas, periciales y testimonios de otras posibles víctimas.

El caso ha movilizado a colectivos feministas y a la comunidad educativa local, que exige justicia y sanciones ejemplares. Se cree que el problema no es nuevo, y que más estudiantes podrían animarse a hablar tras la valiente declaración de la joven. Las autoridades educativas, por su parte, han prometido colaborar con las investigaciones y reforzar los protocolos de protección estudiantil.

Este escándalo ha puesto en evidencia la urgencia de abordar el acoso en los espacios educativos, así como la necesidad de mecanismos efectivos para que las denuncias no queden en el olvido. La joven denunciante se ha convertido en un símbolo de lucha, y su voz ha abierto una puerta hacia una posible transformación en la forma en que se maneja la violencia de género en las escuelas.