Los generales y otros altos oficiales apresados en la operación Coral 5G, estructuraron un «entramado» criminal» para cometer una serie de violaciones a la leyes, «aprovechando su cercanía y apoyo irrestricto del «principal ejecutivo del país».

Así lo establece el Ministerio Público en el expediente de solicitud de medida de coerción en contra de los generales Juan Carlos Torres Robiu, Julio Camilo de los Santos Viola, Boanerges Reyes Batista; el capitaán de Navío Franklin Mata Flores, los coroneles Carlos Lantigua Cruz y Yehudy Guzmán Alcántara.

Señala que los altos oficiales crearon empresas a nombre de personas relacionadas al financiero de las instituciones en la que tenían influencia, para supuestamente “suplir combustibles y materiales gastables”, «los cuales nunca eran entregados, realizándose cuadres ficticios para pasar los controles de auditoría y así poder distraer fondos millonarios del Estado».