Aracelis Agua Santa, madre de una joven excadete de 19 años, denunció que la investigación sobre el abuso sexual que sufrió su hija está siendo obstaculizada por quienes deberían esclarecer los hechos. Según Agua Santa, los responsables de la pesquisa estarían distorsionando la verdad y manejando la evidencia de manera parcial, lo que impide que se descubra lo ocurrido.
La madre explicó que el hecho ocurrió en mayo, pero la falta de avances la llevó a hacer público el caso. “Estamos peleando con unos monstruos. Aquí van a querer tapar toda la verdad”, aseguró, enfatizando que el proceso no puede ser confiable si quienes investigan están involucrados en la recolección de pruebas.
Por su parte, el abogado de la joven, Alberto Fiayo, indicó que aún esperan ser llamados por la Procuraduría para continuar con el caso. El subdirector vinculado al hecho fue suspendido, pero Agua Santa lamenta que pese a la gravedad de la acusación, la justicia no se esté moviendo con la rapidez y transparencia que exige la situación.
La madre aseguró que se enteró del abuso durante una visita a la Academia Policial y que seguirá buscando justicia para su hija mientras considera que las autoridades responsables del caso no cumplen con su deber.
Santa también denunció que durante cuatro meses no aparecieron pruebas esenciales, como el teléfono de su hija ni otros elementos que podrían esclarecer el caso, lo que aumentó su frustración y la llevó a ventilar públicamente la situación. Señaló que la demora y la falta de transparencia generan desconfianza en el proceso y podrían favorecer a los responsables del abuso.
La familia insiste en que se garantice una investigación imparcial, sin la intervención de los mismos cuerpos policiales que podrían estar vinculados al hecho. Mientras tanto, la joven afectada recibe apoyo de su madre y de su defensa legal, quienes aseguran que no cesarán hasta que se haga justicia y se proteja la integridad de la víctima.
