El presidente del Partido Esperanza Democrática, Ramfis Domínguez Trujillo, aseguró que la República Dominicana “se está cayendo a pedazos” y prometió que, tras completar la convención interna de su organización, asumirá una oposición “férrea y frontal” contra el Gobierno del PRM.

Durante una entrevista televisiva, Ramfis afirmó que la población está “harta de la política tradicional” y que su partido trabaja en silencio fortaleciendo su estructura nacional. Denunció que el país atraviesa una crisis múltiple: altos costos de la canasta básica, apagones constantes, inseguridad ciudadana, migración descontrolada y un endeudamiento “insostenible”.

El dirigente opositor criticó que, pese al pacto energético firmado en 2021, el sistema eléctrico “no funciona” y aseguró que el apagón reciente demuestra el colapso del modelo actual. Propuso explorar energía nuclear como alternativa y reformar por completo el sistema eléctrico.

Sobre seguridad y justicia, acusó al Gobierno de manipular cifras y afirmó que la delincuencia y los homicidios no han disminuido. Sostuvo que sin una justicia efectiva “los criminales entran por una puerta y salen por la otra”.

También adelantó que para 2028 ya no tendrá impedimentos constitucionales para aspirar a la Presidencia, asegurando que el país necesita “una figura disruptiva” distinta a los partidos tradicionales, a los que acusa de haber fracasado por décadas.

En materia internacional, afirmó que de llegar al poder tendría una relación más estrecha con Donald Trump, asegurando que la República Dominicana se beneficiaría de acuerdos arancelarios y de una política migratoria más estricta.

Ramfis concluyó que el PRM, el PLD y la Fuerza del Pueblo “son lo mismo con diferentes colores”, y que el país requiere “una transformación total” en economía, justicia, energía, agricultura y seguridad, áreas que, según él, el Gobierno ha manejado de manera deficiente.

Además, reiteró que en 2025 su partido iniciará una ofensiva política nacional con actos, recorridos y propuestas “contundentes”, asegurando que no se limitará a la crítica, sino que presentará soluciones concretas para “rescatar el futuro de la República Dominicana” y enfrentar lo que considera un deterioro acelerado del país bajo la actual gestión.