El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, calificó este domingo como “piratería de corsarios” las acciones de Estados Unidos contra buques petroleros vinculados al país, luego de que se confirmara la persecución de un tercer tanquero en aguas internacionales, frente a las costas venezolanas, en medio de un creciente despliegue militar en el mar Caribe.
De acuerdo con informaciones oficiales, la Guardia Costera de Estados Unidos mantiene una persecución activa del buque petrolero Vela 1, el cual figura en la lista de sancionados desde junio de 2024. Washington sostiene que la embarcación navega con bandera falsa y cuenta con una orden judicial de incautación, por lo que su estatus legal es considerado irregular.
En un mensaje difundido a través de su canal de Telegram, Maduro denunció lo que definió como una “campaña de agresión” contra Venezuela. “Tenemos 25 semanas denunciando, enfrentando y derrotando una ofensiva que va desde el terrorismo psicológico hasta los corsarios que han asaltado petroleros”, afirmó, sin referirse de manera directa a las dos confiscaciones realizadas por EE. UU. durante el fin de semana.
El mandatario venezolano aseguró que el país está preparado para “acelerar la marcha de la revolución profunda”, en alusión al proyecto político del chavismo, y advirtió que estas acciones forman parte de una estrategia hostil contra la nación suramericana.
Estados Unidos interceptó este domingo un tercer petrolero cuyo estado actual se desconoce y aún no está claro si transportaba crudo venezolano, según confirmó un funcionario estadounidense citado por la cadena CNN. No obstante, el Pentágono y la Guardia Costera remitieron todas las consultas a la Casa Blanca, que hasta el momento no ha corroborado oficialmente la operación en curso.
El sábado, la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, informó sobre la confiscación del tanquero Centuries, con bandera panameña, al que la Casa Blanca calificó como parte de la llamada “flota fantasma” venezolana, utilizada —según Washington— para traficar petróleo sancionado y financiar al “régimen narcoterrorista” de Maduro.
La situación ha elevado la tensión regional, con reportes de mayor presencia militar estadounidense en el Caribe y maniobras de aviones de combate durante el fin de semana. Incluso, el presidente de Estados Unidos ha señalado públicamente que no descarta un conflicto bélico con Venezuela, un escenario que mantiene en alerta a la comunidad internacional.
