La Selección Dominicana de Fútbol volverá a jugar en casa este miércoles en el estadio del Cibao FC, como parte de la Concacaf Friendly Series, una serie de partidos amistosos avalados por la FIFA. El combinado nacional se medirá ante San Vicente y las Granadinas, en un encuentro que busca fortalecer la cohesión del grupo y ofrecer minutos de juego a nuevos talentos que se integran nuevamente al equipo.
Entre los jugadores convocados destacan Lucas Bretón, quien milita en el fútbol español y proviene de la cantera del Cibao FC, además de Edinson Azcona y otras figuras jóvenes que vienen mostrando gran proyección. Este compromiso representa una oportunidad para evaluar el crecimiento del plantel, que este año ha enfrentado rivales de alto nivel como Uruguay, demostrando una evolución constante en el ámbito internacional.
“Contento de volver a mi país y entrenar con la selección. Es una emoción enorme jugar en casa”, expresó uno de los convocados durante la concentración en Santiago. Otros jugadores coincidieron en que disputar estos partidos en territorio dominicano refuerza el sentido de pertenencia y la conexión con la afición local, que ha sido clave en el impulso del fútbol nacional.
El ambiente en el campamento es de optimismo y camaradería, ya que varios futbolistas regresan tras ausentarse en convocatorias anteriores. El cuerpo técnico confía en que estos amistosos sirvan para consolidar una base sólida de cara a los próximos compromisos oficiales, mientras los jugadores esperan ofrecer un espectáculo digno para la fanaticada que los verá nuevamente defender los colores de la patria en su propio terreno.
La Federación Dominicana de Fútbol (Fedofútbol) resaltó que estos encuentros amistosos forman parte del plan estratégico para continuar elevando el nivel competitivo del equipo nacional. El objetivo es que los jugadores mantengan ritmo de juego internacional y fortalezcan la química dentro del grupo, además de seguir sumando experiencia ante selecciones del Caribe y América. “Cada partido que jugamos representa una oportunidad para crecer, corregir y avanzar hacia una República Dominicana más fuerte en el fútbol”, expresó un representante de la federación.
Por su parte, los fanáticos del Cibao FC y de la selección han mostrado gran entusiasmo ante el regreso del equipo al país, llenando las gradas en los entrenamientos previos y prometiendo un apoyo total durante el partido. Este evento deportivo no solo impulsa el desarrollo del fútbol nacional, sino que también refuerza la identidad y el orgullo de una generación de jóvenes jugadores que sueñan con llevar a la “Quisqueya Futbolera” a nuevos niveles en el panorama internacional.