La comunicadora Altagracia Salazar analizó el panorama político dominicano en su programa Sin Maquillaje, donde afirmó que el país se encuentra atrapado “entre viejos con mañas y jóvenes sosos”.
En su comentario, la veterana comunicadora criticó que los partidos políticos continúan dirigidos por figuras que superan los 60 años y que se resisten a ceder espacio a las nuevas generaciones, mientras que los jóvenes, aunque más educados y conservadores, carecen de propuestas y discursos que conecten con la ciudadanía.
Salazar comparó el contexto dominicano con las recientes elecciones en la ciudad de Nueva York, donde el voto joven fue determinante, y destacó que la mayoría de la población dominicana aún es menor de 40 años.
Sin embargo, señaló que esta realidad no se refleja en las estructuras partidarias, dominadas por dirigentes envejecidos que no promueven renovación. “Loro viejo no aprende a hablar”, expresó, enfatizando que históricamente los grandes cambios sociales han sido impulsados por personas menores de 30 años.
Durante su intervención, la comunicadora lamentó que tanto el oficialismo como la oposición mantengan prácticas políticas obsoletas. Mencionó el caso de la Fuerza del Pueblo, que recientemente juramentó una dirección política donde —según dijo— no hay nadie menor de 50 años, incluyendo exgenerales como Pedro de Jesús Candelier y José Miguel Soto Jiménez. “Seguimos viendo los mismos rostros, los mismos discursos, y ninguna señal de apertura hacia las nuevas generaciones”, afirmó.
Salazar también criticó la apatía de muchos jóvenes, a quienes definió como “sosos”, por su falta de iniciativa y compromiso en los procesos de cambio político y social. En su opinión, la juventud actual debe asumir con responsabilidad el rol protagónico que le corresponde, pues “son los únicos que pueden proponer y hacer los cambios que el país necesita”.
Finalmente, la periodista advirtió que la combinación entre líderes envejecidos que no ceden el paso y una juventud desmotivada genera un panorama poco alentador para el futuro político dominicano. “Viejos que no ceden y jóvenes sin propuesta: ¿para dónde que vamos a ir?”, concluyó.