El presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, fue recibido este viernes por el rey Carlos III en el Castillo de Windsor antes de una cumbre con líderes europeos para coordinar nueva asistencia militar a Ucrania.

La reunión, encabezada por el primer ministro británico, Rishi Sunak, tiene como objetivo reforzar las defensas aéreas de Ucrania y garantizar el suministro de misiles de largo alcance. Zelenskyy y Sunak estarán acompañados por el secretario general de la OTAN y la primera ministra danesa, mientras que otros líderes participarán de manera remota.

Este encuentro refleja la intención de Occidente de consolidar su apoyo frente a la invasión rusa y de coordinar acciones estratégicas conjuntas para fortalecer la seguridad ucraniana.

Durante la cumbre, los líderes discutirán también la formación y provisión de equipo especializado para las fuerzas ucranianas, así como mecanismos de financiamiento que permitan mantener la operatividad militar a largo plazo.

Zelenskyy destacó la importancia de la unidad europea y atlántica en estos momentos críticos, subrayando que la cooperación internacional será clave para garantizar la estabilidad y la defensa de Ucrania frente a nuevas amenazas.

Fuentes diplomáticas indicaron que se espera un anuncio conjunto sobre paquetes de ayuda militar adicionales, incluyendo sistemas avanzados de radar y misiles defensivos, que podrían ser entregados en las próximas semanas.

Expertos consideran que este tipo de reuniones no solo busca el apoyo militar inmediato, sino también reforzar la presión política sobre Rusia, enviando un mensaje claro sobre la determinación de Occidente en mantener su respaldo a Kiev.

Además, se prevé que durante la jornada se aborden estrategias para asegurar la reconstrucción de infraestructuras críticas y la protección de civiles en las zonas afectadas por el conflicto, consolidando un enfoque integral de asistencia internacional.

Al final de la reunión, Zelenskyy se mostró optimista sobre los resultados y agradeció el compromiso de los países aliados, asegurando que cada contribución fortalecerá la capacidad defensiva de Ucrania y acelerará el regreso a la paz.

Analistas destacan que estos encuentros también sirven como plataforma para coordinar sanciones económicas y diplomáticas más efectivas contra Rusia, reforzando la estrategia global de presión para detener la escalada del conflicto.