La tormenta tropical Melissa continúa causando estragos en Haití, obligando a cientos de personas a buscar refugio en los techos de sus viviendas para salvar sus vidas ante las inundaciones. Imágenes que circulan en redes sociales muestran calles colapsadas, casas dañadas y comunidades completamente afectadas por el fenómeno.
Las fuertes lluvias y los vientos intensos han provocado el desbordamiento de ríos, lo que ha dejado a varias zonas bajo el agua y aisladas, mientras las familias intentan protegerse de los efectos devastadores de la tormenta. El impacto ha sido especialmente severo en comunidades vulnerables, donde las infraestructuras no están preparadas para fenómenos de esta magnitud.
Las autoridades locales han hecho llamados a la población para mantener la calma y trasladarse a lugares seguros, mientras organismos de emergencia trabajan en labores de rescate y asistencia humanitaria. Se espera que Melissa continúe afectando al país vecino durante las próximas horas, por lo que la situación se mantiene crítica y bajo constante monitoreo.
Varias carreteras y puentes han quedado intransitables debido a los derrumbes y el agua acumulada, dificultando el acceso a zonas afectadas y retrasando las operaciones de ayuda. Los equipos de rescate luchan por llegar a comunidades aisladas mientras el nivel del agua sigue aumentando en varias provincias.
El sector agrícola también ha sufrido grandes pérdidas, con cultivos inundados y ganado afectado, lo que podría generar problemas de abastecimiento de alimentos en los próximos días. Agricultores y familias dependen de la ayuda urgente para mitigar el impacto de la tormenta.
Organizaciones internacionales y locales han activado planes de asistencia y entrega de suministros para las familias afectadas, incluyendo alimentos, agua potable y refugios temporales. La población haitiana enfrenta un desafío crítico mientras la tormenta Melissa continúa su paso por el país.
Además, los servicios de electricidad y telecomunicaciones se han visto gravemente afectados, dejando a muchas comunidades incomunicadas y sin energía. Las autoridades advierten que la recuperación podría tardar varios días y llaman a la población a seguir las indicaciones de seguridad hasta que el fenómeno disminuya su intensidad.