El Comité de Operaciones de Presas y Embalses informó este viernes que las recientes lluvias registradas en gran parte del territorio nacional han provocado un leve aumento en los niveles de agua de las principales presas del país. Sin embargo, aclaró que la situación se mantiene bajo control y no representa riesgo alguno para las comunidades cercanas a estos embalses.

El director ejecutivo del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INDRHI), Olmedo Caba, explicó que presas como Tavera, Rincón, Hatillo, Valdesia y Sabana Yegua se encuentran en niveles que oscilan entre un 64% y un 92% de su capacidad. Detalló además que la presa de Monción, una de las más vigiladas por su cercanía al límite de almacenamiento, se mantiene estable y bajo constante monitoreo.

Asimismo, Rafael Salazar, administrador de la Empresa de Generación Hidroeléctrica Dominicana (EGEHID), informó que el aumento en los niveles de agua ha permitido incrementar la generación eléctrica en un 50%, fortaleciendo así la matriz energética nacional. Las autoridades llamaron a la ciudadanía a mantenerse atenta a las orientaciones del Centro de Operaciones de Emergencias (COE), recordando que los suelos están saturados y cualquier lluvia adicional podría generar crecidas repentinas.

De acuerdo con el informe, la presa de Valdesia, que abastece gran parte del Gran Santo Domingo, es una de las infraestructuras que recibirá un importante aporte hídrico en las próximas horas, debido a las lluvias sobre la cuenca del río Nizao. El Comité de Operaciones señaló que esta información ha sido remitida al Centro de Operaciones de Emergencias (COE), que será el encargado de emitir las alertas necesarias y coordinar las acciones preventivas en caso de un incremento repentino del caudal.

El COE, en conjunto con el INDRHI y la EGEHID, mantiene un monitoreo constante de las presas mediante sistemas de medición en tiempo real, que permiten conocer minuto a minuto el comportamiento del agua en cada embalse. Según las autoridades, este seguimiento ha sido clave para evitar desbordamientos y garantizar un manejo controlado de los vertidos, protegiendo tanto la infraestructura como a las comunidades ubicadas aguas abajo.

Finalmente, las instituciones reiteraron que, aunque el panorama actual no representa peligro, la población debe permanecer atenta ante la posibilidad de nuevas lluvias. Las autoridades recomendaron no acercarse a los cauces de ríos ni cruzar arroyos crecidos, recordando que la prevención y la colaboración ciudadana son fundamentales para reducir riesgos ante cualquier eventualidad climática.