Una patrulla del Departamento de Crímenes y Delitos de la Policía Nacional (DICRIM) se enfrentó a tiros con una presunta banda de delincuentes en San Cristóbal, luego de rastrear un vehículo reportado como robado en esa provincia del sur del país. El hecho dejó como resultado un muerto y dos heridos, quienes fueron trasladados en delicado estado al Hospital Juan Pablo Pina.
De acuerdo con el informe de la Dirección Regional Sur de la Policía Nacional, los agentes fueron alertados por radio sobre un ciudadano herido por arma de fuego, identificado como José Eduardo García Capellán, de 37 años, conductor de la aplicación InDriver, quien fue despojado de su vehículo, teléfono celular, documentos y dinero por tres individuos armados.
Gracias al rastreo satelital GPS, las autoridades localizaron el automóvil sustraído en la carretera que conduce al municipio de Cambita Garabitos. Al intentar interceptar a los sospechosos, estos abrieron fuego contra la patrulla, impactando la unidad policial. Los agentes respondieron al ataque, produciéndose un intercambio de disparos que culminó con la muerte de Juan Manuel García (alias “Huampa”, de 22 años), mientras recibía atenciones médicas, y con dos de sus acompañantes heridos: Luis Alberto Lara Dionisio (“Andy”, de 18 años) y Alexander Gómez Álvarez, de 23.
El vocero policial en San Cristóbal, Víctor Garcés, informó que los delincuentes permanecen bajo custodia policial en el hospital y que los organismos investigativos de la institución profundizan las pesquisas sobre el caso. Además, confirmaron que el vehículo robado fue recuperado y será entregado a su propietario.
Delincuencia en RD
La delincuencia en la República Dominicana se ha convertido en una de las principales preocupaciones de la ciudadanía, afectando tanto a zonas urbanas como rurales. Robos, atracos a mano armada, homicidios y violencia juvenil figuran entre los delitos más frecuentes, generando un clima de inseguridad que impacta directamente la calidad de vida de los ciudadanos.
Las denuncias por hechos delictivos aumentan día tras día, y muchos de estos crímenes son perpetrados en plena luz del día, lo que ha provocado una creciente desconfianza en la capacidad de las autoridades para garantizar el orden público.
A pesar de los esfuerzos del gobierno y de la Policía Nacional, que ha implementado operativos y planes estratégicos como el “Mi País Seguro”, las estadísticas continúan mostrando cifras preocupantes. Factores como el desempleo, la desigualdad social, la impunidad y la falta de oportunidades para los jóvenes han sido señalados como causas estructurales que alimentan la criminalidad.
La ciudadanía exige medidas más efectivas y sostenidas, así como una reforma profunda del sistema judicial y policial que priorice la prevención y garantice la justicia para las víctimas.