Machado enfatizó que su objetivo no es solo recibir un reconocimiento internacional, sino usar el Nobel de la Paz como un impulso para movilizar a los ciudadanos en la construcción de una Venezuela libre y democrática. Señaló que la esperanza no puede depender únicamente de actores externos, sino del compromiso activo de la sociedad civil dentro del país.
Asimismo, la opositora criticó la continuidad del régimen de Maduro, al que acusa de mantener estructuras de corrupción, violencia y represión que han deteriorado la vida cotidiana de los venezolanos. Señaló que la comunidad internacional debe seguir presionando para garantizar la transición hacia un gobierno legítimo y respetuoso de los derechos humanos.
Finalmente, Machado reiteró que, aunque el premio es un honor personal, lo más importante es el mensaje de unidad y resistencia que transmite a millones de venezolanos que buscan un cambio real. Afirmó que seguirá trabajando desde todos los frentes para asegurar que la lucha democrática no pierda impulso, hasta que se restablezca la libertad y la justicia en Venezuela.