Durante el programa Z Digital, la comunicadora Julia Muniz denunció un incidente ocurrido mientras transitaba por la avenida George Washington, próximo al Hotel Jaragua, donde fue seguida y abordada de manera agresiva por un motorizado de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett). Según Muniz, el agente tocó repetidamente el vidrio de su vehículo mientras ella utilizaba la aplicación Waze, poniendo en riesgo su integridad y la de otros conductores.
La periodista relató que el funcionario se cruzó por carriles contrarios y mostró una actitud intimidante que, a su juicio, excede la autoridad de un agente de tránsito. “Ese hombre estaba totalmente agresivo y expuso su vida al seguirme sin mirar lo que venía de frente, y también expuso la mía”, expresó Muniz, quien pidió que se tomen medidas para prevenir este tipo de acciones.
Muniz dirigió su llamado al general Pascual Cruz Méndez, director de la Digesett, solicitando una mejor organización y capacitación del cuerpo de tránsito. La comunicadora enfatizó la importancia de que los agentes ejerzan su autoridad de manera respetuosa y profesional, evitando poner en peligro a los ciudadanos que cumplen con las normas de tránsito.
Finalmente, Muniz instó a que se establezcan protocolos claros de actuación y entrenamiento constante para los agentes, destacando que el respeto al ciudadano no se impone con agresividad, sino con orden y control adecuado. “Así no podemos seguir. La Digesett no puede pretender que el ciudadano respete un manejo así”, concluyó.
Crecientes denuncias
La Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (DIGESETT) enfrenta crecientes denuncias por el comportamiento de sus agentes durante operativos de tránsito. Ciudadanos han reportado casos de abuso de autoridad, maltrato verbal y físico, así como la aplicación inconsistente de las normas. Por ejemplo, un joven denunció que su gorra fue confiscada por agentes bajo el pretexto de no portar casco, a pesar de que la prenda le había costado dos días de trabajo. Asimismo, en Moca, residentes acusaron a agentes de actuar de forma agresiva contra un joven, generando indignación en la comunidad.
Estas situaciones han provocado un llamado a la reflexión sobre la necesidad de una formación más rigurosa y un control más efectivo sobre el accionar de los agentes. La DIGESETT ha habilitado canales para recibir denuncias y sugerencias ciudadanas, pero la efectividad de estas medidas aún está en evaluación. Mientras tanto, la percepción pública sobre la institución sigue siendo motivo de preocupación, especialmente en lo que respecta al trato hacia los ciudadanos y la aplicación equitativa de la ley.